La crisis presupuestaria de la OTAN
Ciertamente, desde la Cumbre de Newport de 2014, la OTAN se vanagloria de haber obtenido por parte de los países miembros una reafirmación del famoso principio del 2 % del PIB destinado al gasto militar[1].
Pero la realidad es más oscura.
Gráfico 1 — Porcentaje de PIB destinado al gasto militar por país, 2014 y 2018. Fuente: CNBC.
Aunque Trump o la OTAN hayan logrado que aumenten considerablemente algunos PIB reducidos como los de Lituania (PIB de 47 000 millones de dólares estadounidenses en 2017), Letonia (30 000 millones) y Rumanía (212 000 millones), así como ciertos PIB brutos reducidos como los de Turquía (851 000 millones), Países Bajos (826 000 millones) y Canadá (1,653 billones), el análisis de la gráfica precedente revela los siguientes hechos:
. Estados Unidos (PIB de 19 billones) disminuye su gasto con respecto a su PIB
. Esta reducción no queda compensada por el aumento de Canadá, ya que la contribución total norteamericana ha disminuido
. La contribución de Europa en su conjunto (PIB de 17 billones) ha aumentado pero de manera totalmente marginal
. De hecho, la media de los porcentajes de PIB destinados al gasto militar por los Estados miembros de la OTAN se ha visto muy reducida
Teniendo en cuenta que estas cantidades son porcentajes de PIB, resulta interesante señalar que el PIB de la UE ha descendido con respecto a 2014. El muy leve aumento en el porcentaje de gasto militar europeo se corresponde en realidad con un descenso en su valor absoluto[2]. Ídem para Canadá[3]. Solo el PIB de Estados Unidos ha aumentado en este período[4] y ha contrarrestado en este caso el descenso por parte de este país.
Gráfico 2 — PIB de la Unión Europea en miles de millones de dólares estadounidenses, 2009-2017. Fuente: Trading economics.
El presupuesto de la OTAN[5] votado en diciembre de 2018 es de 250 millones de euros (civil) y 1 400 millones de euros (militar)[6]. El gasto militar total de los países miembros de la OTAN se sitúa en torno al billón de euros.[7]
Este panorama del gasto en el seno de la OTAN parece alentador, pero sin dinámica de progreso por crecimiento o, sobre todo, por optimización (cuanto menos desacuerdo, mejor participación de los distintos países, etc.), la OTAN no va a poder afrontar los nuevos desafíos de la defensa de Occidente.
Según la propia OTAN, estos son tres de los principales desafíos de adaptación[8]:
. Guerra asimétrica (terrorismo, Estado Islámico, etc.)
. Ciberguerra (emprendida por China y Rusia, cuyo progreso tecnológico parece acentuarse)
. Guerra espacial (ataques de satélites estratégicos…)
En vista de la magnitud de estos desafíos de adaptación, si la OTAN no posee capacidad de entendimiento que permita utilizar conjuntamente el gasto militar de todos los países…
Leer mas : GEAB 134 / Suscripción
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[1] Fuente: Bloomberg, 15/03/2019
[2] Fuente: TradingEconomics (EU)
[3] Fuente: Trading Economics (Canada)
[4] Fuente: Trading Economics (USA)
[5] Contribución directa de los Estados miembros para el funcionamiento de la OTAN, que por tanto no incluye el coste del envío de tropas por parte de los distintos países.
[7] El gasto militar total de todos los miembros de la OTAN. Fuente: OTAN, 10/07/2018
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