Home GEAB 177

GEAB 177

El boletín mensual del Laboratorio Europeo de Anticipación Política (LEAP) - 15 Sep 2023
El extracto publico

La temporada diplomática de este otoño reveló una clara ventaja para el Sur Global en el concierto de las naciones. En primer lugar, la cumbre de los BRICS, en la que se anunció la adhesión de seis nuevos países: Arabia Saudí, Egipto, Emiratos Árabes Unidos (EAU), Etiopía, Irán y Argentina[1]. Esta decisión demuestra la confianza que estos países tienen en su propio poder y en la estabilidad y eficacia de sus instituciones.

Inmediatamente después, demostraron la legitimidad de esta confianza orientando a su favor la declaración conjunta emitida por el G20. Este texto recibió el apoyo unánime de los países miembros, incluidos China y Rusia, aludiendo a Ucrania sin condenar abiertamente al Kremlin[2].

La conclusión que nuestro equipo extrae de esta secuencia de choque es que, no sólo el mundo multipolar se está desplazando hacia quienes le dieron forma, a saber, los BRICS y sus socios del Sur Global, sino que ahora tienen la capacidad de arrastrar a otros países y regiones a su estela, empezando por Oriente Medio, seguido de cerca por África. En efecto, la expansión de los BRICS demuestra no sólo la amplitud de un poder económico que hay que aprovechar (véase nuestro panorama económico al respecto en este mismo número), sino también un poder geopolítico y, por tanto, diplomático, del que la cumbre del G20 no fue más que un anticipo. Este nuevo ritmo nos permite anticipar las próximas rutas diplomáticas que estos países impondrán a los anteriores artífices de la guerra y la paz, Estados Unidos y la Unión Europea.

Porque después de la guerra viene la paz, como después de la lluvia viene el buen tiempo.

Así pues, prevemos una proliferación de compromisos de negociación en las distintas zonas de conflicto del mundo, que repasaremos aquí de forma no exhaustiva.

La elección de los candidatos de los BRICS

Casi una treintena de países han manifestado su deseo de integrarse en el bloque, y seis han sido seleccionados e invitados a formar parte de él, invitación que cada uno de ellos deberá aceptar de aquí a finales de año. A diferencia de la UE, los BRICS no han hecho públicos sus criterios y proceso de integración. Por tanto, es comprensible que lo hayan hecho caso por caso. Por ello, la próxima secuencia diplomática a corto plazo tendrá lugar con y entre los nuevos miembros de los BRICS. Esta secuencia ya ha sido iniciada por Egipto y Etiopía, que han abierto negociaciones sobre el proyecto de la presa del Renacimiento[3]. Desde hace varios años, los dos países están enfrentados por la construcción de esta presa en el Nilo. Este proyecto faraónico, lanzado por Etiopía en 2011 y ahora finalmente concluido, es presentado como vital para el país y denunciado como una amenaza por Egipto y Sudán, que temen que se reduzca su acceso al agua del río[4]. Egipto se queja de la acción unilateral de Etiopía en este contexto, y los BRICS podrán proporcionar el marco de debate que ha faltado hasta ahora para que los dos países lleguen a un compromiso (véase nuestro artículo “África, el último peón en el tablero multipolar mundial”, en este mismo número).

Irán y Arabia Saudí, enemigos desde hace mucho tiempo, se encuentran en una situación similar[5]. Una normalización de las relaciones, ya en marcha, podría llevarse a cabo con la ayuda del resto de los Estados BRICS, y los EAU como intermediario, entre otros. Al igual que la relación entre estos dos países y la OCS[6], Irán tiene más interés en esta integración que Arabia Saudí, de ahí el entusiasmo mostrado por Teherán al término de la cumbre[7], mientras que Riad se muestra más moderado[8], dadas las dificultades internas que atraviesa Irán desde hace varios meses. Además, la cuestión nuclear iraní ha limitado durante demasiado tiempo las relaciones internacionales del país, y el acceso a una institución internacional como los BRICS, que consigue desafiar a Occidente manteniendo sus credenciales, es una oportunidad demasiado buena para dejarla pasar (la importancia estratégica de la región es una baza inestimable para todo tipo de alianzas, véase nuestro artículo “El pivote de Oriente Medio” en este mismo número). Por ello, Irán se mostrará sin duda más flexible y abierto al diálogo con Arabia Saudí, lo que debería llevarle a hacer concesiones respecto a Israel.

Este acercamiento está en consonancia con nuestra larga anticipación[9] de la creación de un Oriente Medio 3.0. Esta anticipación describía la gran transición iniciada por Arabia Saudí (y completada desde entonces), para la que el país tiene una necesidad vital de paz en la región con el fin de transformar su régimen político tanto como su economía. Para completar esta empresa y abrazar el ambicioso futuro que se ha trazado el gobierno (encarnado por el proyecto NEOM y The Line[10]), ahora sólo hace falta normalizar las relaciones con Irán y firmar por fin la paz con Israel.

Potencia con capacidad de proyección

Más allá de los retos diplomáticos que conciernen directamente a sus futuros miembros, el BRICS+ constituirá una potencia con capacidad para proyectarse en todo el planeta. Ante todo en África, donde la proliferación de golpes de Estado debe considerarse como un primer paso hacia la estabilización. La situación en el Sahel puede verse como un espejo de aumento de la recomposición geopolítica mundial (reequilibrio del balance internacional de poder, “neosoberanismo”, definición de una política exterior autónoma)[11]. Esta fase de estabilización, que Francia rechaza, no se logrará sin el apoyo de socios, entre los que destacan China, por su influencia económica a través de sus imprescindibles inversiones directas, y Rusia, por el apoyo militar indirecto que proporciona a través de la influencia del grupo Wagner (que ahora vuelve a estar bajo control del Kremlin desde el frustrado golpe de Estado de su líder Prigogine).

En segundo lugar, en América Latina, donde Brasil y Argentina son las dos principales potencias que podrían constituir la primera fuerza del subcontinente (aparte de México, más cercano a América del Norte, en particular a través del TLCAN). También en este caso, los BRICS podrían constituir un marco adicional de negociación capaz de sostener la voluntad de estos dos países de aumentar su interdependencia[12], incluso dentro del subcontinente, con proyectos como la moneda común “Sur”[13]; pero también acogiendo las inversiones chinas y muy probablemente sin rechazar por completo las relaciones con Estados Unidos.

Comentarios

Suscríbase para dejar un comentario.
Contenidos

Todo el mundo sabe que lo que no se dobla, se rompe. Esta es la amenaza que se cierne sobre la economía de la Unión Europea a corto plazo. El [...]

El panorama político de la Unión Europea está experimentando una reconfiguración paradójica: las ideas de la derecha, y aún más de la extrema derecha, están en alza; sin embargo, la [...]

Adrien Hubert trabaja en los círculos internacionales de la criptomoneda y Web3 en general. Ha creado varias empresas, entre ellas Geminy, de la que es Director General. Nos da su [...]

África, el último peón del tablero multipolar mundial Egipto, Etiopía, Sudáfrica: el eje BRICS de África está más orientado hacia el Este, aunque cabe señalar que Addis Abeba, la capital [...]

Petróleo: lo barato es historia Como demostramos en nuestro panorama económico, los precios del petróleo se mantendrán altos a corto y medio plazo, impulsados principalmente por la acción coordinada de [...]

Artículos relacionados
GEAB
15 Apr 2024

Inversiones, tendencias y recomendaciones (abr)

#bitcoin #finanzas #inversión #oro

Bitcoin a la mitad, posicionamiento a muy corto plazo Como continuación de nuestro artículo sobre la recuperación de Bitcoin por parte de Estados Unidos, le recomendamos que siga posicionándose a [...]

GEAB
15 Mar 2024

Inversiones, tendencias y recomendaciones (mar)

#bitcoin #inflación #inversión #nuclear #tiktok

La guerra tiene un largo futuro por delante En línea con nuestro artículo sobre Europa y Ucrania, creemos que la industria de defensa tiene un largo y brillante futuro por [...]

GEAB
15 Feb 2024

Inversiones, tendencias y recomendaciones (febr)

#Crypto #dolar #euro #petroleo

Petróleo: Si rompéis los precios, habrá represalias El petróleo caro será la norma en 2024. El GEAB siempre ha creído que la llegada de Estados Unidos como primer productor mundial [...]